¿Por qué es importante hablar de los recursos hídricos? ¿Cómo sería la vida sin ellos?
Sabemos que el agua es un recurso natural renovable muy importante para la economía, la generación de energía y la supervivencia de los seres vivos en la tierra.
Las aguas superficiales o subterráneas, lechos de ríos, arroyos y riberas presentes en las fuentes hídricas están disponibles para todo tipo de uso en una región, el 60% de la población mundial dispone de agua subterránea como su principal agua de consumo ya que es la principal reserva de agua dulce para su abastecimiento. (Costa, Teixeira, Silva, Do Nascimento, Oliveira, de Oliveira & de Jesus Silva, 2012)
Las estadísticas señalan que las aguas subterráneas representan más del 95 % de las reservas mundiales de agua dulce. Sin embargo, a pesar de la gran importancia que representa para la sociedad la utilización de las aguas subterráneas, en algunos casos no se le ha dado el tratamiento adecuado en lo que respecta a la explotación de estos recursos. Esta situación ha traído como consecuencia efectos adversos en la calidad del agua y, en consecuencia, la aparición de brotes de enfermedades de transmisión hídrica. (Cruz, Osorio & Fernández, 2012)
Existen varias causas de la creciente degradación de los recursos hídricos siendo la falta de conciencia del problema una de las principales, seguida por la expansión económica actual que produce altos impactos en las industrias y en la forma del manejo de este recurso.
El problema recurrente de falta de agua dulce y de una baja calidad del agua especialmente en los núcleos urbanos se da por la existencia de aguas residuales domesticas e industriales presentes en el sector, de igual forma los problemas sanitarios irregulares de basura y usos de plaguicidas ocasionan el continuo deterioro de los sistemas hídricos.
La demanda de agua para el consumo humano está determinada por el factor económico en cuanto al ingreso familiar y al precio del agua dispuesto en cada región, y por el factor social en cuanto a la composición familiar y al tamaño de la población, que de acuerdo a cada sector podrá tener acceso en diferentes condiciones de acuerdo a sus capacidades.
El uso y distribución de agua en la sociedad al ser un derecho para determinadas personas requiere de una adecuada coordinación que implemente políticas hídricas sobre su cuidado y control, ya que la existencia de reglas junto con una correcta rendición de cuentas permitirá la reducción de conflictos por el agua, un abastecimiento necesario, y la propagación de la fuente vital hacia lugares que necesitan este recurso.
Según el artículo 318 de la Constitución Ecuatoriana, el Estado a través de la Autoridad Única del Agua es responsable de la planificación y gestión de los recursos hídricos que se destinarán al consumo humano y riego, garantizando la soberanía alimentaria, caudales sanos y actividades productivas, autorizando el uso del agua. (DEL AGUA, 2014)
Es así como, la conservación de los recursos hídricos se consigue a través de políticas públicas, de la conciliación entre el desarrollo económico, social y la protección del medio ambiente y ecosistemas. ¡El servicio de saneamiento y de gestión de agua es un derecho público!
Para realizar el correcto cuidado de los recursos hídricos se requiere una planeación del manejo integral del agua, entre comisiones encargadas de establecer políticas de agua a nivel estatal y de generar proyectos de conservación del recurso natural, se necesita además la construcción de represas o pozos de inducción y captación del agua, un correcto control de la contaminación es decir, conocer las condiciones de la devolución del agua al ecosistema después de su uso, de igual forma se requiere un continuo monitoreo del recurso sobre su cantidad y calidad para determinar su utilización, una disponibilidad de recursos económicos para aplicar medidas de control del deterioro de los recursos de agua y efectuar el manejo de cuencas con reforestaciones encaminadas a la protección del suelo para regular el agua suministrada en las cuencas.
En el proceso de cuidado y control de saneamiento existe el método de tratamiento de agua por medio de Hipoclorito de Sodio electrolítico el cual sigue una técnica segura que será analizada en comparativa con otros desinfectantes para determinar su consciente y adecuada elección.
Para su producción es necesario un abastecimiento de agua un tanque de almacenamiento ofreciendo ventajas relacionadas con la compra, el transporte, el almacenamiento y la aplicación de las soluciones de hipoclorito. A demás requiere de energía eléctrica, o energías alternativas, en este caso paneles solares; lo cual lo convertirá en un producto sostenible a través del tiempo. (Witt & Reiff, s.f.) es necesario preparar la correcta concentración de sal, volumen de agua, el tiempo de operación del equipo hasta obtener el desinfectante final.
Se busca generar en el propio sitio el insumo desinfectante de baja concentración para inducir un uso extensivo y sistemático del mismo en sitios susceptibles de presencia de virus y bacterias. Es necesario ayudar en la supervivencia de los sitios rurales y urbanos, y de la naturaleza a través de la preservación de los recursos hídricos.
El cuidado de nuestras fuentes hídricas garantiza la generación de energía, riego, manejo de cuencas, drenaje, suministro de agua y saneamiento, abastecimiento, protección contra inundaciones, suministro industrial, turismo, recreación, pesquerías, navegación, preservación y rehabilitación de ecosistemas. (Van Hofwegen & Jaspers, 1998) siendo esta problemática para Clorid S.A una oportunidad de brindar alternativas tecnológicas de desinfección y saneamiento de agua a través de equipos generadores de hipoclorito de sodio, que colaboran en el control de la existencia y expansión de enfermedades de carácter hídrico cumpliendo el paso inicial de desinfección para posteriormente obtener agua segura de consumo humano a través de la purificación general del agua.
Bibliografía
Cortés, I., Cortés, M., & Cisneros, H. (2015). Recursos hídricos. Cultura Científica y Tecnológica, (31). Recuperado de:
Costa, A., Teixeira, C., Silva, C., Do Nascimento, J., Oliveira, M., de Oliveira Queiroz, Y., & de Jesus Silva, M. (2012). Recursos hídricos. Caderno de Graduação-Ciências Exatas e Tecnológicas-UNIT-SERGIPE, 1(1), 67-73. Recuperado de:
Cruz, S., Osorio, C., & Fernández, C. (2012). La comunicación educativa, herramienta de gestión ambiental y vía para disminuir enfermedades de transmisión hídrica. Revista Cubana de Información en Ciencias de la Salud (ACIMED), 23(3), 263-278. Recuperado de: https://www.medigraphic.com/pdfs/acimed/aci-2012/aci123e.pdf
DEL AGUA, U. (2014). Ley Orgánica de recursos hídricos, usos y aprovechamiento del agua. Recuperado de: https://municipiobanos.gob.ec/banos/images/LEYES/LEY_ORGANICA_DE_RECURSOS_HIDRICOS__USOS_Y_APROVECHAMIENTO_DEL_AGUA.pdf
Jouravlev, A. (2003). Los municipios y la gestión de los recursos hídricos. CEPAL. Recuperado de: https://repositorio.cepal.org/bitstream/handle/11362/6429/S0310753_es.pdf?sequence=1&isAllowed=y
Van Hofwegen, P., & Jaspers, F. (1998). Marco analítico para el manejo integrado de recursos hídricos. Recuperado de: http://cidbimena.desastres.hn/docum/Honduras/MarcoAnaliticoparaelManejoIntegradodelosRecursosHidricos.pdf