Con el pasar de los años, el agua se ha convertido en una de las mayores problemáticas en el mundo, ya que según cifras de la Organización de las Naciones Unidas (ONU) en el 2003 mencionó que, el ser humano extrae un 8% del total anual de agua dulce renovable y se apropia del 26% de la evapotranspiración anual y del 54% de las aguas de escorrentía accesibles, por lo que el crecimiento en la contaminación del agua ha crecido considerable te en los últimos años, arrojando un una cifra 502 000 muertes por diarrea al año ocasionadas por el agua contaminada. De aquí a 2025, la mitad de la población mundial vivirá en zonas con escasez de agua.
Se estima que alrededor de 700 millones de personas en el mundo podrían verse forzadas a desplazarse debido a la escasez de agua de aquí a 2030, siendo unos 2.000 millones de personas siguen sin tener acceso al agua potable, debido a factores de disponibilidad geográfica o económica; por lo tanto, se expone que casi dos tercios de la población mundial padecen de escasez grave de agua durante al menos un mes al año.
El 80% de las personas que habitan en zonas rurales en el mundo deben usar fuentes de agua no seguras, como menciona la ONU, 3 de cada 10 carecen de acceso a abastecimiento de agua.
Agua contaminada
La Organización Mundial de la Salud (OMS) define el agua contaminada como agua que cambia de composición hasta que se vuelve inutilizable. Es decir, se trata de agua tóxica que no se puede beber ni utilizar para actividades básicas como la agricultura o ganadería, además la misma es fuente de condiciones insalubres. Cada año, más de 500.000 personas mueren en todo el mundo por afecciones como diarrea causada por su consumo. Además, el agua contaminada comúnmente propaga cólera, disentería, fiebre tifoidea y poliomielitis, ya que sirve como cultivo para numerosos agentes patógenos.
Tipos de contaminantes del agua
Los principales contaminantes del agua incluyen bacterias, virus, parásitos, fertilizantes, pesticidas, medicamentos, nitratos, fosfatos, plásticos, heces e incluso materiales radiactivos. Estos elementos no siempre tiñen el agua, por lo que en muchas ocasiones no se observa contaminación a simple vista. Por lo tanto, se suelen utilizar pequeñas muestras y análisis químicos de organismos acuáticos para determinar la calidad del agua. Estos son los tipos más importantes de agua contaminada:
Microorganismos patógenos: Este tipo de contaminación se produce por microorganismos como bacterias, virus o protozoos las cuales causan enfermedades.
Desechos orgánicos: Su origen son los residuos producidos por el ser humano o sus actividades como las ganaderas. La existencia en agua de materia biodegradable o material de fácil descomposición fomenta el crecimiento de bacterias.
Sustancias químicas inorgánicas: Como ácidos, sales y metales tóxicos como el mercurio. En concentraciones elevadas pueden causar graves daños en los seres vivos, bajo rendimiento de las producciones agrícolas y corrosión en equipos de trabajo.
Nutrientes vegetales inorgánicos: Como son los nitratos y fosfatos. Son sustancias solubles que las plantas necesitan para su desarrollo y que estimulan el crecimiento de algas y otros organismos.
Compuestos orgánicos: como el petróleo, la gasolina, los plásticos, los plaguicidas, etc. Son sustancias que pueden durar largos periodos de tiempo en el agua, ya que pueden ser difíciles de degradar por los microorganismos.
Sedimentos y materiales suspendidos: Son partículas que no se disuelven fácilmente en el agua. Estas partículas ocasionan que el agua se vuelva turbia, lo que dificulta la vida de los organismos bajo el agua. Los sedimentos asentados pueden dañar a los organismos acuáticos en la ocupación de áreas de alimentación, desove de peces u obstruyendo cursos naturales de agua.
Sustancias radiactivas: Como los isótopos radiactivos solubles. Cuando están presentes en el agua, pueden permanecer durante largos periodos de tiempo, y acumularse en los tejidos de seres vivos, ocasionando enfermedades genéticas con el tiempo.
Contaminación térmica: Es provocada por las centrales de energía u otras industrias que liberan agua a temperaturas muy altas, disminuyendo la capacidad del agua de mantener oxígeno, afectando gravemente a los organismos acuáticos.
Causas de contaminación del agua
Tal y como menciona la Organización OXAM, indica que, los factores naturales, como la filtración de mercurio en la corteza terrestre, contaminan los océanos, ríos, lagos y canales. Sin embargo, el deterioro del agua suele provenir de las actividades humanas y sus consecuencias, algunas de ellas son:
Calentamiento global: Debido a la emisión de dióxido de carbono, la temperatura de la tierra calienta el agua, lo que hace que disminuya su nivel de oxígeno.
Deforestación: La deforestación agota las fuentes de agua y produce desechos orgánicos, convirtiéndose en un caldo de cultivo para las bacterias contaminantes.
Actividades industriales agrícolas: Los productos químicos vertidos en estos sectores son una de las principales causas de la eutrofización del agua.
Vertidos de aguas fecales: Las Naciones Unidas aseguran que más del 80% de las aguas residuales no tratadas del mundo fluyen a océanos y ríos.
Tráfico marítimo y derrame de combustibles: La mayor parte del plástico que contamina el océano proviene de barcos pesqueros, petroleros y vehículos de carga; además, el transporte y almacenamiento de petróleo y sus derivados puede provocar fugas y filtraciones en las fuentes de agua.
Acceso al agua No contaminada
Según cifras y estadísticas de la ONU de 2019, en 2015 el 71% de la población mundial (5200 millones de personas) utilizaba un servicio de suministro de agua potable gestionado de forma segura, es decir, ubicado en el lugar de uso, disponible cuando se necesita y no contaminado.
Así mismo, el Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Refugiados (UNHCR), menciona que, una de cada tres personas no tienen acceso a agua potable y dos de cada cinco personas no tienen acceso a instalaciones básicas de saneamiento para lavarse las manos.
El ser humano posee un 70% de agua en el cuerpo, por lo que es necesario mantenerlo limpio y sano, ya que además de limpiar el organismo y eliminar las toxinas, es un eficaz vehículo para transportar las vitaminas y sales minerales.
El agua potable ayuda al ser humano a sentirse sano, a hacer la digestión, mantiene la musculatura en buen estado, actúa refrigerando o calentando el cuerpo y además llega a transportar el oxígeno entre las células del cuerpo.
Por lo que, su beneficio radica en:
Ayudar en la digestión y evitar el estreñimiento
Esto ayuda a que el sistema digestivo funcione correctamente previniendo el estreñimiento.
Ayudar al mantenimiento de la belleza de la piel
Cuando el cuerpo recibe suficiente agua, la piel estará hidratada.
Regular la temperatura corporal
Las propiedades térmicas del agua y su capacidad para liberar el calor del cuerpo cuando el sudor se evapora de la superficie de la piel son de gran ayuda en el mantenimiento de la temperatura corporal durante todo el día.
Mejorar el sistema inmunológico
Cuando el cuerpo recibe la cantidad adecuada de agua, mejora el sistema inmunológico.
Resuelve el mal aliento
El mal aliento es una clara señal de que el cuerpo necesita más agua.
Reciclamiento de aguas residuales
El reciclaje de aguas residuales se perfila como un medio clave para aliviar la presión sobre los recursos hídricos del planeta y mejorar el saneamiento e higiene de las poblaciones más desfavorecidas. (OMS,2020)
En 2017, más de 220 millones de personas necesitaron tratamiento preventivo para la esquistosomiasis, una enfermedad grave y crónica provocada por lombrices parasitarias contraídas por exposición a agua infestada.(OMS,2019)
Así mismo, los principales contaminantes del agua son desechos químicos de las fábricas e industrias. Aguas residuales y otros residuos que demandan oxígeno (en su mayor parte materia orgánica, cuya descomposición produce la desoxigenación del agua) Minerales inorgánicos y compuestos químicos.
¿Cómo es la cloración en la potabilización del agua y saneamiento?
Consiste en añadir hipoclorito de sodio líquido no jabonoso, sin fragancia ni color. En su forma comercial se puede conseguir como lejía o cloro, siendo este último un oxidante.
Es por ello que, el cloro en sus múltiples formas ha sido usado durante mucho tiempo con propósitos de sanitización del agua, al punto que en la percepción común de la gente es sinónimo de inocuidad bacteriana o incluso de agua potable. Si nos referimos al cloro en sí, este es un gas de tono amarillento y sumamente irritante para las mucosas, al grado que la exposición directa a este por unos minutos puede ser letal.
Si se bombea gas cloro en el agua y permanece en contacto con ella se generarán el ion hipoclorito y el ácido hipocloroso, ambos capaces de oxidar y corroer la materia orgánica y los microorganismos. El hipoclorito de sodio elimina patógenos más variados y en menos tiempo. La proporción de ácido hipocloroso e hipoclorito que existe en el agua depende del pH.
Actualmente el derivado más usado del cloro en este ámbito es el hipoclorito de sodio.
Según el Servicio Ecuatoriano de Normalización (INEN), menciona que :
Para la eliminación de aguas residuales se deben primar los siguientes puntos.
Coeficiente de mayoración.
Curvas intensidad-frecuencia-duración de lluvias.
Curvas de variación intensidad-área.
Tiempo de concentración inicial.
Coeficientes de escurrimiento.
Velocidad máxima.
Velocidad mínima.
Longitudes de tuberías y colectores de la red y emisarios, clasificándolos por diámetro y sección.
Número y tipo de conexiones domiciliarias, clasificadas por diámetros.
Caudal de aguas residuales.
Caudal total a evacuar (máximo, medio y mínimo).
Tipo, unidades de tratamiento, equipos y sustancias químicas.
Caudal máximo, mínimo y seguro del cuerpo receptor.
Caudal de las estaciones de bombeo y curva (s) de sistema (s).
Régimen de elevación.
Tiempo de bombeo diario.
Por otro lado según el 3er Informe sobre el Desarrollo de los Recursos Hídricos en el Mundo. que publicó la UNESCO en el 2003, explica que:
Cada día, 2 millones de toneladas de aguas residuales y otros efluentes desembocan en las aguas del mundo.
Cada año mueren más personas a causa de un agua insalubre que por muerte violenta, incluida la guerra.
La fuente más importante de contaminación del agua es la falta de gestión y tratamiento adecuados de los residuos humanos, industriales y agrícolas.
La calidad del agua necesaria para cada uso humano varía, al igual que los criterios utilizados para evaluarla. Por ejemplo, para el agua potable se exigen altos estándares de calidad, mientras que se admite una menor calidad para su uso en los procesos industriales.
Cuadro de potabilización o desinfección de agua con cloro al 1%
Como explica la Organización Panamericana de la Salud Organización Mundial de la Salud (OPS/OMS), en su guía Técnica de Tratamiento y Desinfección de Agua para consumo humano por medio de cloro.
¿Cómo ayuda Clorid S.A?
Clorid S.A. ofrece una tecnología innovadora la cual es capaz de crear Hipoclorito de sodio in situ generado mediante electrólisis de salmuera, un proceso para separar elementos de un compuesto mediante una corriente eléctrica; usando materiales que para el público general no representan un peligro y además son mucho más fáciles de conseguir, como es agua, sal n°1, además de electricidad lo cual da como resultado el Hipoclorito de sodio in Situ a un costo muy bajo.
Del mismo modo, los equipos V, se destina a un uso netamente industrial, ya que estas pueden llegar a producir hasta 9.000 litros diarios, siendo estos ideales para la potabilización de agua de ciudades grandes. Los equipos V, están altamente diseñados para potabilizar y tratar hasta 36.000.000 litros de agua por día considerando una dosificación de 2PPM, principalmente basándose en la norma según el INEN (Servicio Ecuatoriano de Normalización).
El objetivo principal para el control de aguas residuales, es el tratamiento de las plantas donde se hace la mayor parte del proceso de separación de los contaminantes, dejando una pequeña parte que completará la naturaleza en el cuerpo receptor. Para ello, el nivel de tratamiento requerido está en función de la capacidad de auto purificación natural del cuerpo receptor (Clorid S.A).
Beneficios que brinda los equipos Clorid S.A
• Mantenimiento, instalación y operación fácil.
• Producto ecológico.
• Producción solo con sal común (NaCl), agua y electricidad.
• Asistencia técnica y capacitación.
• Elimina el consumo de botellas plásticas.
• Industria Ecuatoriana.
• Materia prima segura y de fácil adquisición.
• Tecnología 100% garantizada.
• Elimina la dependencia de proveedores con productos químicos.
• Minimiza riesgos operacionales.
• Ahorro económico: Producir cloro con nuestros equipos cuesta $0.01 centavo de dólar por litro.
• Resultado: Hipoclorito de sodio in situ.
Al ser internacionalmente nombrados por OPS/OMS (Organización Mundial de la Salud/Organización Panamericana de la Salud), acerca de la desinfección de agua a niveles caseros en zonas urbanas y rurales, Clorid S.A, cuenta también con una certificación por parte del Instituto Izquieta Pérez, cuyos resultados fueron avalados nuevamente por el laboratorio privado químico biomolecular JAZOLAB.
Agricultura:
Para su uso en el área de la agricultura, este es capaz de ser utilizada en:
Empleada en invernaderos.
Se aplica para la desinfección del agua de riego.
En los casos en los que se reutiliza el agua, el uso de fertilizantes se ve reducido.
En semilleros se emplea la tecnología para desinfección en el agua de riego.
Elimina patógenos que afectan directamente al crecimiento de las plantas.
Según informes de Serviyeco, menciona que la tecnología de desinfección de agua evita que esta se contamine por microorganismos, descendiendo los valores por debajo de 100 ufc/ml.
Desinfección eficiente, eliminando la sobre dosificación de químicos y los costes extra asociados. Así mismo, elimina el mantenimiento sobre los químicos y los contenedores.
En el caso de invernaderos con reutilización de agua, el consumo de fertilizantes se reduce en más de un 32%, las pérdidas de cultivos se reducen por debajo del 1%, la producción anual en invernaderos crece más de un 35%.
Conclusión:
Se estima que son 2000 millones de personas se abastecen de una fuente de agua potable que está contaminada por heces.
El mundo debe concientizar la práctica del constante cuidado a la fuente hídrica, pues de ellos depende la supervivencia humana, animal y vegetal.
Hoy en día, en los países menos adelantados, el 22% de los centros sanitarios carecen de fuentes de agua, el 21% de servicios de saneamiento, y el 22% de servicios de gestión de desechos, puntualizó la ONU.
En conclusión, la reutilización de aguas residuales o contaminadas es una acción muy importante a realizar si se toma en cuenta el factor ecológico y económico de una nación, ya que estas pueden llegar a abastecer a población que carezca de agua para su uso, eso sí, se debe considerar el tipo de contaminación a la que fue expuesto el líquido y el método con el que se trató, se deben realizar estudios de laboratorio, tanto químicos como microbiológicos para saber si el agua tratada puede servir para consumo humano o si se destinaría para sectores como la agricultura.
Referencias:
Chulluncuy-Camacho, N. C. (2011). Tratamiento de agua para consumo humano. Ingeniería Industrial, (029), 153-170.
Cifuentes, E., Blumenthal, U., Palacio, G. R., Bennett, S., Quigley, M., Peasey, A., & Romero-Alvarez, H. (1993). Problemas de salud asociados al riego agrícola con agua residual en México. Salud Pública de México, 35(6), 614-619.
Cifuentes, E., Blumenthal, U., Ruiz, G., Bennett, S., & Peasey, A. (1994). Escenario epidemiológico del uso agrícola del agua residual: El Valle del Mezquital, México. Salud pública de México, 1(1), 3-9.
García, L., & Iannacone, J. (2020). Pseudomonas aeruginosa un indicador complementario de la calidad de agua potable: análisis bibliográfico a nivel de Sudamérica. The biologist, 12(1).
Garzón-Zúñiga, M. A., Buelna, G., & Moeller-Chávez, G. E. (2012). La biofiltración sobre materiales orgánicos, nueva tecnología sustentable para tratar agua residual en pequeñas comunidades e industrias. Tecnología y ciencias del agua, 3(3), 153-161.
González González, M. I., & Chiroles Rubalcaba, S. (2011). Uso seguro y riesgos microbiológicos del agua residual para la agricultura. Revista cubana de salud pública, 37(1), 0-0.
Minguet, P. A., Solís, M. Á. U. (2012). La responsabilidad por un mundo sostenible. Bilbao. Edit. Descle de Brouwer.
Mora Alvarado, D., & Portugez, C. F. (2020). Agua potable y saneamiento: Coberturas en viviendas y más allá del hogar en Costa Rica 2017.
Mujeriego, R. (Ed.). (1990). Riego con agua residual municipal regenerada. Barcelona: Universitat Politècnica de Catalunya.
Nieto López, F. (2015). Mejora del proceso de producción de agua ultrapura en la Central de Ciclo Combinado Arcos de la Frontera (Iberdrola).
OMS, 2021.Organización de las Naciones Unidas.
Oxam,2020.
Rojas, R. (2002). Sistemas de tratamiento de aguas residuales. Gestión integral de tratamiento de aguas residuales, 1(1), 8-15.
Romero-Aguilar, M., Colín-Cruz, A., Sánchez-Salinas, E., & Ortiz-Hernández, M. A. (2009). Tratamiento de aguas residuales por un sistema piloto de humedales artificiales: evaluación de la remoción de la carga orgánica. Revista internacional de contaminación ambiental, 25(3), 157-167.
UNESCO. (2003). Agua para todos, agua para la vida. Informe de las Naciones Unidas sobre el desarrollo de los recursos hídricos en el mundo.
UNESCO. (2009). 3er Informe sobre el Desarrollo de los Recursos Hídricos en el Mundo. El agua en un mundo en constante cambio.
Zerpa, M. P. (2018). Economía ecológica vs agua.
Comentários